[Verso 1]
Prisionero del horizonte entre la nada y la oscuridad, camino de huellas que gimen seguridad, huyo, porque arde el abismo de perdición, lejos de esa nada, encerrándome en mi maldición.

La agría y ostentosa vil serranía, en susurros hablando con catrina se la oía, me destinan a morir en este estrepitoso paraje, y bajo de las tierras negras se fecunda la hiel en un brebaje.

Sera, que mata, como veneno de rosa malolienta, será su fórmula secreta, las lágrimas de un demonio, que encerrado en su odio, blasfemo la desdicha de estar vivo en el desamor.

Crece un pino debajo de mis miedos, en aquel horizonte muy escondido a lo lejos, como materia invisible cae en la oscuridad un rayo, con broca de diamante como herradura veo un caballo, que cabalga sulfuradamente por libertad, libertad, que se me quiere otorgar.


[Verso 2]
Pero catrina está punto de despertar, y mis raíces sanguíneas van a ser desgarradas, cuando la garra de catrina sea levantada.
La noche se apagó, la nada se afloró y por fin aparecía, catrina se levanta toda vaga, vacía y fría.
Quiero de este sueño volar, pero solo camino, porque es la realidad.
Catrina despertó, tiene sed de rencor, y se acerca lentamente a mi corazón.
Sera que el orgullo, es tan grande que no lo quieres perder, porque catrina desea que te liberes de él.

Sentí que ella es tan fría como la nieve, cuando ella lentamente me besaba la sien.
Me devora, ella vejez yo juventud, ella enigmática y yo lleno de virtud.

Ella pureza y yo perversión,
Ella la más pura verdad, yo la más blasfemada mentira.

Ella es la muerte y yo soy un poeta sin vida, viene a quitarme algo que vivirá en mi de por vida.
Sí, mi vil alma maldita……