Creo que escuché a tu maestro cantar
Cuando estaba enfermo, en cama
Supongo que te dijo todo
Lo que guardo bajo llave en mi cabeza
Tu maestro te llevó de viaje
Al menos eso es lo que dijiste
¿Y ahora vuelves para darle vino y pan a tu prisionero?

Lo conociste en algún templo
En el que se quedaban con tu ropa en la puerta
Él era sólo un hombre sin numerar en una silla
Que acababa dе volver de la guerra
Y tú еnvuelves su cansado rostro con tu pelo
Y él te ofrece el corazón de la manzana
Y luego toca tus labios, repentinamente desnudos
De todos los besos que vestimos tiempo antes

Y te dio un ovejero alemán para pasear
Con un collar de cuero y tachas
Y nunca te pidió que le explicaras o que hablaras
Sobre todos los pequeños detalles
Como sobre quién tenía la palabra y quién una piedra
O a quién le escribías por correo
Ahora nuestro amor es un secreto en la cuadra
Y nunca se detiene, ni siquiera cuando tu maestro falla
Y te llevó en su aeroplano
Que voló sin manos
Y navegaste por sobre los lazos de lluvia
Que barrieron a la multitud de las gradas
Luego mató las luces de una solitaria vía
Y un simio de glándulas angelicales
Borró las volutas finales de dolor
Con música de bandas elásticas

Y ahora escucho a tu maestro cantar
Te arrodillas para que venga
Su cuerpo es un hilo dorado
Del que pende tu cuerpo
Su cuerpo es un hilo dorado
El mío se ha entumecido
Oh ahora escuchas cantar a tu maestro
Tu camisa está toda deshecha

Y te arrodillarás ante su cama
La que lustramos hace tiempo
Antes de que tu maestro decidiera
Hacer de nieve la mía
Tus ojos refulgen y tus nudillos están rojos
Y estás hablando muy bajo
No, no puedo desentrañar lo que dijo tu maestro
Antes de hacer que te fueras
Y creo que estás jugando de manera muy ruda
Para una dama que estuvo en la luna
He estado echado sobre esta ventana por demasiado tiempo
Para acostumbrarme a una habitación vacía
Y tu amor es un poco de polvo en la manga de un viejo
Que golpea su pie al compás de una canción
Y tus muslos son una ruina, y quieres demasiado
Digamos que volviste alguna vez demasiado pronto

Yo amé perfectamente a tu maestro
Todo lo que él sabía se lo enseñé yo
Se estaba muriendo de hambre en algún profundo misterio
Como un hombre seguro de lo que es cierto
Y te envié a él con la garantía
De que podía enseñarle algo nuevo
Y le enseñé cómo tú solías extrañarme
Sin importar lo que él dijera
Sin importar lo que hicieras tú

Creo que escuché a tu maestro cantar
Cuando estaba enfermo, en cama
Supongo que te dijo todo
Lo que guardo bajo llave en mi cabeza
Tu maestro te llevó de viaje
Al menos eso es lo que dijiste
¿Y ahora vuelves para darle vino y pan a tu prisionero?